Juan Salvador Gaviota, es una fábula en forma de novela escrita por Richard Bach, sobre una gaviota y su aprendizaje sobre la vida y el volar, y una homilía sobre el camino personal de superación.
La novela cuenta la historia de Juan Salvador Gaviota, una gaviota que está muy aburrida de que su vida se limite a las disputas diarias por el alimento con sus compañeras gaviotas y tiene una ferviente pasión por volar. Él se esfuerza por aprender todo lo que puede acerca del vuelo, evitando competir, hasta que su actitud da como resultado su expulsión de la bandada. En soledad, él vive practicando, aprendiendo; y avanzando en su camino hacia la perfección, mientras lleva una vida feliz.
Lo único que hace es practicar su vuelo y no se dedica a hacer lo que hacen las demás gaviotas. La bandada intenta hacerlo cambiar, puesto que no ven normal que una gaviota intente hacer piruetas en el aire, en vez de buscar su alimento. sigue practicando y persigue libre, aprender nuevas maneras de acrobacias.
Su bandada no lo entendía, ni siquiera sus papás, a quienes en vez de darles gusto, les avergonzaban los logros de Juan; él era la primera gaviota en hacer acrobacias aéreas. Un día se elevó tan alto que al caer en picada perdió el control y se estrelló con el agua; cuando recobró el sentido se prometió ser como las demás gaviotas, pero en ese mismo instante rompió su promesa, ya que voló a setecientos metros de altura en la noche, cosa que ninguna gaviota había hecho, pues las gaviotas no vuelan de noche. Al llegar a la Bandada había una Sesión de Consejo, a la cual lo llamaron para que se pusiera en el centro, lo que solo podía significar dos cosas: gran honor o exilio. El Consejo destierra a Juan.
Él se fue a los Lejanos Acantilados, pero no le importó estar solo y siguió aprendiendo. Un día mientras volaba, dos radiantes gaviotas se acercaron volando, una de ellas le dijo que volara, porque tenía que pasar a una nueva etapa, y las tres gaviotas volaron hasta desaparecer en el cielo. La mayor idea de Juan era poder ser libre, y si su libertad era volar y aprender a hacer acrobacias y morir en el acto era un riesgo que había que correr, entonces la libertad era la recompensa más grande para una gaviota.
Juan trasciende a otra sociedad en la que todas las gaviotas gozan del vuelo. Él fue capaz de hacer esto luego de trabajar solo y con gran esfuerzo por mucho tiempo, el respeto surge en este lugar como contraste a la fuerza coercitiva que se daba en el seno de la "Bandada de la comida" a la que perteneció Juan.
"¿Quieres volar tanto, que serás capaz de perdonar a la Bandada y aprender, y volver a ellos un día y trabajar para ayudarlos a saber?" es lo que Juan le dice a su primer estudiante Pedro Pablo Gaviota, antes de llegar a profundizar en la enseñanza. La idea de que el más fuerte puede llegar a más fuerte y podrá dejar atrás a sus amigos más débiles parece totalmente rechazada.
Por lo tanto, el amor, el respeto merecido y el perdón, parecen ser igualmente importantes tanto como la libertad de no ceder a la presión de obedecer las reglas, sólo porque sean malamente aceptadas.
Richard Bach ha declarado que, en cierto sentido, él no es el autor de Juan Salvador Gaviota. Afirma que las palabras le llegaron en visiones, y que él simplemente las escribió. No ha hecho otra declaración similar sobre ninguna de sus otras obras.
Texto: http://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Salvador_Gaviota
Fotos: Jose Mesa Díaz (jmargazki).